1. Grietas en las Paredes
Las grietas son líneas o fisuras que aparecen en la superficie de la pared. Pueden ser de diferentes formas y tamaños, y cada una puede indicar un problema diferente:
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Grietas Horizontales: Son aquellas que van de lado a lado en la pared. A menudo pueden ser un signo de problemas estructurales en el edificio, como problemas con los cimientos.
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Grietas Verticales: Se extienden hacia arriba o hacia abajo desde el techo o el piso. Estas grietas pueden ser causadas por el asentamiento del edificio o cambios en la temperatura y la humedad.
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Grietas en Forma de Telaraña: Estas grietas tienen un patrón similar a una telaraña. A menudo son causadas por la tensión en la superficie de la pared debido a cambios en la estructura o movimiento del edificio.
2. Agujeros en las Paredes
Los agujeros son aberturas en la pared que pueden ser causadas por diferentes razones:
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Agujeros por Clavos o Tornillos: Son pequeñas aberturas causadas por clavos o tornillos anteriores que fueron retirados. Estos agujeros deben ser tapados y cubiertos para mantener una superficie lisa en la pared.
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Agujeros Grandes o Irregulares: Pueden ser causados por accidentes, muebles que golpean la pared o daños intencionales. Estos agujeros pueden requerir un poco más de trabajo para repararlos y pueden necesitar parches o rellenos especiales.
De todas las lesiones mecánicas en los edificios, las grietas en muros y paredes son, por su propia apariencia, las más conocidas y alarmantes. Éstas grietas son únicamente una respuesta del edificio para adaptarse a cambios que se producen dentro o fuera del mismo.
Los edificios son algo vivo. Respiran, se mueven y envejecen. Su movimiento es algo que a simple vista no podemos apreciar, pero es constante. En todo momento se producen cambios geométricos diminutos a causa de los cambios de temperatura, de humedad o de los movimientos del terreno, y llega un punto en el que muchos de los materiales que componen un edificio, por su propia rigidez, no pueden resistir dichos cambios, que se van acumulando.
De esta forma, a raíz de dichos cambios y movimientos, aparecen grietas y fisuras, que no siempre son peligrosas, ya que en ocasiones solo indican que el edificio se ha ido adaptando a los cambios. Sin embargo, a menudo necesitarán de un estudio pormenorizado, para hallar sus causas y poder solucionarlas a tiempo.
- Grieta. Es aquella que afecta al elemento constructivo completo. Es decir, a todo su espesor. Estaríamos hablando de grieta cuando ésta atraviesa todas las capas del muro (o en su caso del pavimento, de la cubierta, etc.).
- Fisura. Es aquella que afecta únicamente al acabado superficial del elemento, por ejemplo a un alicatado de azulejos, un enfoscado de cemento o un enlucido de yeso. Pero nunca afectará a la capa portante que sostiene dicho acabado (por ejemplo, un muro de ladrillo, hormigón o piedra).
En muchos artículos se diferencian grietas y fisuras por su tamaño o su anchura. En nuestra opinión, ésto no tiene mucho sentido por dos razones: no hay ningún valor de espesor establecido que defina el límite entre unas y otras y la dimensión de la grieta solo indica cuanto se ha deformado el conjunto una vez producida la rotura. Por esto, consideramos más útil la diferenciación mencionada antes.